junio 16, 2022 5 lectura mínima
¿Te suena esto? ¿Gastroscopias, colonoscopias, pruebas de intolerancia a la lactosa, pruebas de heces, análisis de sangre y pruebas de alergia?
¿Y no se ha encontrado ningún resultado concreto en ninguna prueba?
Entonces quizá también tengas el síndrome del intestino irritable.
Existen muchas causas para este síndrome, y muchos tratamientos diferentes para curarlo.
En este artículo descubrirás qué vitaminas, minerales y otros suplementos pueden ayudarte a controlar tu intestino irritable.
El término "síndrome de intestino irritable" se utiliza para describir diversas molestias digestivas. A pesar de los análisis médicos, normalmente no se encuentran causas naturales o bioquímicas. Muchos de los afectados tienen que recorrer un largo camino con muchas revisiones hasta que finalmente son diagnosticados. Curiosamente, aproximadamente el doble de mujeres padecen síndrome del intestino irritable que hombres.
Aunque el síndrome del intestino irritable no es peligroso, es muy estresante, y afecta al bienestar y a la calidad de vida.
Existen síntomas diversos, como calambres o dolor punzante abdominal, así como molestias al ir al baño. Muchas personas que padecen el síndrome del intestino irritable tienen diarrea, que puede alternarse con estreñimiento, dolor al defecar, sensación de tener que ir constantemente al baño o de que no lo han hecho por completo. Sin embargo, también pueden aparecer síntomas como hinchazón, eructos, flatulencia o hinchazón abdominal.
Los síntomas también pueden extenderse por el abdomen. Por ejemplo, aquellos que padecen síndrome del intestino irritable dicen tener dificultades para concentrarse, nerviosismo, depresión, fatiga, problemas circulatorios o trastornos del sueño.
Una causa común del síndrome del intestino irritable es el estrés. El estrés psicológico tiene efectos perjudiciales para la digestión.
Sin embargo, existen muchas otras posibles causas, como las siguientes:
Si padeces síndrome del intestino irritable y sueles tener un intestino nervioso, estos consejos pueden ayudarte:
Si tienes el síndrome del intestino irritable, debes asegurarte de llevar una dieta sana y ligera.
Ciertas vitaminas, ácidos grasos, minerales y bacterias intestinales pueden ayudar a aliviar tus síntomas y promover tu bienestar.
Presta atención a los siguientes nutrientes:
Una flora intestinal alterada es un importante factor de riesgo del síndrome del intestino irritable. Los probióticos contienen varios microorganismos buenos que colonizan el intestino y privan de nutrientes a los gérmenes patógenos. De este modo, impiden que los patógenos se multipliquen. Además, los microorganismos probióticos aumentan la defensa inmunitaria. Refuerzan la función de barrera del intestino y dificultan que las bacterias invadan el cuerpo. Los probióticos equilibran la flora intestinal y promueven así una pared intestinal sana. Nuestro Probiolac Premium contiene 30 cepas diferentes de bacterias buenas y es un gran apoyo natural para el intestino irritable.
También debes asegurarte de tener un buen suministro de vitamina D. Por qué un buen suministro de esta vitamina vital para los pacientes con síndrome del intestino irritable Científicos de la Universidad de Sheffield determinaron qué papel puede desempeñar una deficiencia de vitamina D en el desarrollo del síndrome del intestino irritable. Concretamente, descubrieron que la mayoría de los sujetos con síndrome del intestino irritable tenían una deficiencia de vitamina D. Además, se encontró una asociación entre los niveles de vitamina D y la calidad de vida, que se midió por el grado en que los síntomas del SII repercutían en la vida diaria de la persona afectada.
Entre otros muchos efectos positivos para la salud el omega-3 también garantiza una flora intestinal sana. Contrarresta la inflamación de la mucosa intestinal y favorece la diversidad de la flora intestinal. Una alta diversidad, es decir, un elevado número de cepas bacterianas intestinales diferentes, indica un muy buen estado de la flora intestinal. Los estudios han descubierto que cuanto más omega-3 se consume, mayor es la diversidad de la flora intestinal. Recomendamos 2 cápsulas de nuestro Omega-3 Premium.
Las vitaminas B desempeñan un papel importante en la producción de energía y en la división celular. En el intestino, esto es especialmente importante porque las células de la mucosa intestinal se dividen naturalmente con mucha frecuencia. Un suministro adecuado de vitaminas del grupo B también garantiza la curación de los daños intestinales.
La vitamina B2 proporciona protección celular antioxidante. Una investigación de varios estudios muestra que los pacientes de intestino irritable no consumían cantidades suficientes de vitamina B2 en su dieta, entre otras cosas.
La vitamina B6 desempeña un papel importante en muchos procesos metabólicos, incluida la construcción de proteínas celulares. Una deficiencia de vitamina B6 provoca pérdida de apetito y diarrea.
La vitamina B12 es necesaria, por ejemplo, para la división celular y la función nerviosa. La deficiencia de vitamina B12 es muy común en las enfermedades inflamatorias del intestino.
Hay muchas causas del síndrome del intestino irritable. El estrés, los factores genéticos y una flora intestinal alterada, por ejemplo, pueden estar detrás de él. Como ocurre con todos los problemas de salud, primero es importante que averigües cuál es la razón de tu intestino irritable. Así que, en primer lugar, hazte un chequeo con un médico.
Además, puedes ayudar a tu intestino con suplementos naturales. Las bacterias probióticas pueden ayudarte a reequilibrar la flora intestinal y mejorar el estado y la actividad de la pared intestinal. La vitamina D, los ácidos grasos omega-3 y las vitaminas del grupo B son también nutrientes importantes en el tratamiento del síndrome del intestino irritable. Por lo demás, asegúrate de reducir el estrés y llevar un estilo de vida saludable.