CÓMO ACELERAR TU METABOLISMO - 6 CONSEJOS SENCILLOS

¿Qué tipo de persona eres? ¿Los que pierden peso de forma súper rápida o los que luchan por hacerlo ?

El motivo suele ser el metabolismo. A menudo se equipara el metabolismo con la digestión. Sin embargo, ¡no es correcto! La digestión es solo una etapa preliminar de los procesos metabólicos.

Además, no hay un solo metabolismo, sino muchos diferentes: entre otros, el metabolismo del azúcar, el metabolismo de las proteínas y el metabolismo de las grasas, que se ocupa de las células grasas.

¿Cómo puedes acelerar tu metabolismo?

Con la ayuda de ciertas vitaminas y hábitos, ¡hacerlo es muy fácil!

¡Aprende ahora!

EN PRIMER LUGAR, ¿QUÉ ES EXACTAMENTE EL METABOLISMO?

En sentido estricto, el metabolismo se refiere a todos los procesos bioquímicos que tienen lugar en nuestras células, como descomponer los nutrientes de los alimentos, proporcionar energía cuando el cuerpo la necesita o transportar los productos de desecho fuera del organismo. Para ello, el cuerpo utiliza tanto los nutrientes que le proporcionamos como las reservas ya creadas. 

El cuerpo necesita una determinada cantidad de energía cada día para mantener todas sus funciones. Esta cantidad se llama también "tasa metabólica basal". Si suministramos al cuerpo más energía en forma de alimentos de la que necesita en ese momento, esta energía se almacena. Esto ocurre, por ejemplo, en los músculos o en el tejido graso subcutáneo. El cuerpo recurre a esta energía almacenada y la descompone, por ejemplo, cuando hacemos ejercicio o trabajo físico, o cuando llevamos una dieta baja en carbohidratos. Si esta energía no se descompone, nos hace ganar peso.

Las hormonas y las enzimas son importantes para el proceso metabólico, ya que está controlado por los sistemas endocrino y nervioso. El órgano metabólico más importante es el hígado. Sin embargo, a veces el metabolismo es demasiado lento y no funciona correctamente. A veces, la razón es el hipotiroidismo.

¿POR QUÉ ACELERAR EL METABOLISMO?

Un metabolismo que funciona bien significa que nuestro cuerpo trabaja con la mayor eficacia posible con los alimentos que recibe. Los hidratos de carbono, las grasas y las proteínas de los alimentos se utilizan de forma óptima. Esto significa que la quema de grasas se estimula igualmente. Por tanto, un metabolismo activado es una buena base para perder peso, pero también para llevar un estilo de vida saludable en general. Cuanto "mejor" sea tu metabolismo, más energía tendrás. Las personas con un "buen" metabolismo son buenos conversores de alimentos. Además, con un buen metabolismo es más fácil perder peso y mantenerlo.

CÓMO ESTIMULAR TU METABOLISMO

1. TOMA SUFICIENTE MAGNESIO

El magnesio pertenece a las llamadas "sustancias esenciales", que son vitales pero no pueden ser producidas por el propio organismo. El magnesio es un importante componente enzimático y, por tanto, interviene en cientos de procesos metabólicos.

2. BEBE SUFICIENTE AGUA

Con el agua apoyas tu digestión y aumentas tu tasa metabólica basal. Beber agua puede estimular tu metabolismo. El agua fría es aún más eficaz para la estimulación metabólica, porque el cuerpo tiene que gastar más energía para calentarla a la temperatura corporal. Las personas que beben agua en lugar de bebidas azucaradas consumen automáticamente menos calorías y tienen más probabilidades de mantener o alcanzar un peso saludable. Si bebes agua una media hora antes de comer, también comes menos porque te sientes más lleno.

3. CONTROLA TUS NIVELES DE OMEGA-3

El omega 3 impulsa tu metabolismo. Las grasas saludables proporcionan energía a las mitocondrias (la central eléctrica de cada célula), lo que a su vez da lugar a un metabolismo más rápido y eficiente. Pocas personas prestan atención a comer pescado 3 veces al día. Es más fácil tomar una de nuestras cápsulas de cápsulas de aceite de pescado todos los días, y así te aseguras de tomar suficiente omega 3.

4. COME ALIMENTOS PICANTES Y RICOS EN PROTEÍNAS

Los alimentos pueden aumentar el metabolismo durante unas horas. Este efecto se llama ETA, Efecto Térmico de los Alimentos, y se refiere a la energía extra que el cuerpo tiene que gastar para digerir y procesar los nutrientes de una comida. Las proteínas son las que requieren más energía del cuerpo. Al comer una comida rica en proteínas, puedes aumentar tu metabolismo entre un 15 y un 30 por ciento. Las proteínas se recomiendan generalmente durante una fase de pérdida de peso porque son saciantes y contrarrestan la pérdida de masa muscular.

Los hidratos de carbono tienen una baja densidad de nutrientes y estimulan el metabolismo sólo entre un cinco y un diez por ciento, y las grasas sólo entre un cero y un tres por ciento.

Condimentar tu comida es aún mejor para tu metabolismo: los alimentos picantes como el chile contienen capsaicina y son verdaderos quemadores de grasa. Este alcaloide provoca un estímulo de calor en el cuerpo y, por tanto, estimula el metabolismo.

5. NO TE OLVIDES DE LAS VITAMINAS B

La vitamina B es todo un grupo de sustancias vitales que son esenciales para nuestros nervios, cerebro y músculos, pero también para nuestro metabolismo. Aquí se hace especial hincapié en la vitamina B6, que ayuda al cuerpo a producir el aminoácido L-carnitina. Éste, a su vez, es necesario para convertir la grasa en energía. Por tanto, la vitamina B6 impulsa indirectamente la quema de grasas y ayuda a eliminar los michelines.

6. HAZ EJERCICIO HABITUAL

Al aumentar la musculatura, la tasa metabólica basal y el consumo de energía también aumentan. Dado que durante la pérdida de peso se pierde tanto masa grasa como masa muscular, es aún más importante compensar esto mediante el ejercicio. Se recomienda hacer entre 30 y 60 minutos de ejercicio al día. Es importante una mezcla de entrenamiento de resistencia y de pesas. Los estudios han demostrado que un entrenamiento HIIT (entrenamiento por intervalos de alta intensidad) es especialmente bueno para el metabolismo, ya que el efecto de postcombustión es más fuerte aquí en comparación con otros deportes.

7. TOMA EL SUFICIENTE HIERRO

Si el cuerpo dispone de muy poco hierro, nuestra energía disminuye rápidamente, nos sentimos cansados, apáticos y desmotivados, y lo mismo ocurre con nuestro metabolismo. Por tanto, la carne, la avena, las semillas de calabaza, las semillas de sésamo, las legumbres o los pistachos deben formar parte de la dieta de forma regular para reponer las reservas de hierro del cuerpo y disponer de suficiente energía. Este mineral también suministra oxígeno a las mitocondrias de las células, lo que a su vez les permite producir más energía. Ésta, a su vez, puede utilizarse de forma óptima para el metabolismo, y el cuerpo también se siente en forma y alerta.

8. UTILIZA ACEITE DE COCO

El aceite de coco contiene más ácidos grasos de cadena media que la mayoría de los aceites. Los ácidos grasos de cadena media pueden estimular el metabolismo más que las grasas de cadena larga (como las de la mantequilla). Según un estudio, la tasa metabólica basal aumenta hasta un doce por ciento, mientras que las grasas de cadena larga sólo pueden estimularla en un cuatro por ciento.

Por tanto, según estos estudios, puede ser beneficioso utilizar el aceite de coco más a menudo.

Sin embargo, el aceite de coco sólo debe disfrutarse con moderación, ya que la proporción de ácidos grasos que contiene es desfavorable: la proporción de ácidos grasos saturados es del 90%. Estos pueden aumentar el riesgo de trastornos lipometabólicos, así como de enfermedades cardiovasculares e incluso de cáncer de mama.

TU CUERPO, TU DECISIÓN

Menos del 30% de todas las enfermedades pueden explicarse puramente por la genética. Para el resto, la causa reside en una mezcla de factores externos. Mediante comportamientos saludables, una vida consciente, una dieta sana y la ingesta de suficientes vitaminas y minerales, tienes un impacto importante en tu bienestar diario.